Con «Big Game» Mark Millar culmina su intención de integrar en un único universo compartido sus diferentes creaciones a lo largo de los años. Se trata de un cómic lleno de acción a raudales con un brutal dibujo de Pepe Larraz, que está espectacular en cada página. Millar siempre ha sabido rodearse de los mejores dibujantes en sus cómics, como Olivier Coipel, John Romita Jr, Stuart Immonen, Jorge Jiménez, por poner sólo algunos ejemplos.
En «Big Game» aparecen todas las creaciones del ahora llamado Millarworld en un evento lleno de acción sin fin. Ya había estado Millar encajando en un universo compartido sus cómics previos, como en «Nemesis Redoleaded» y «Space Bandits«, pero es en «Big Game» que explota esta conexión entre todas sus historias anteriores.
Y lo hace de una manera orgánica, no se me ha antojado forzado. He disfrutado viendo cómo iban apareciendo todos esos personajes que no tenían relación entre sí anteriormente, conformando un único mundo, encajando a la perfección. Desde «Kick-Ass», que lo empezó todo, hasta los recientes «Night Club», «The Magic Order», etc. El cómic es un festival de personajes, en una historia de viajes en el tiempo y otras dimensiones, en las que podemos ver a los personajes de «Empress«, «Renacida», «Space Bandits«, «Starlight» y «Huck», por ejemplo. Millar ha creado un tejido narrativo tan intrincado y bien pensado que cada giro en la trama te hace preguntarte cómo no lo viste venir antes.
Mark Millar ha logrado crear un universo compartido que no solo tiene sentido, sino que es emocionante y lleno de potencial para futuras historias.
El apartado gráfico es espectacular, cada página de Pepe Larraz es un regalo para la vista. Pepe Larraz es conocido por su habilidad para crear escenas dinámicas y llenas de vida, y en «Big Game» se ha superado a sí mismo. Cada página está cargada de detalles, desde las expresiones faciales de los personajes hasta los fondos meticulosamente trabajados. La acción prácticamente salta del papel gracias a su estilo enérgico y fluido.
Larraz tiene una capacidad única para capturar la intensidad de cada batalla, la emoción de cada momento crucial y la belleza en los momentos más tranquilos. Su trabajo en este cómic es simplemente espectacular, haciendo que sea imposible no detenerse a admirar cada viñeta.
Si aún no has leído «Big Game», te estás perdiendo una de las mejores experiencias que el mundo del cómic tiene para ofrecerte este año.